RUTA DE LOS PUEBLOS DE BRICIA. CANTABRIA.

De cada sendero que hago arranco un recuerdo a la memoria, solo uno, para poder ubicarlo, aquí fue la iglesia de Santa María de Quintanilla de Rucandio. Entre otros motivos, quizás porque tras un azaroso camino alli descansé o porque hay enclaves que conectan con ese algo que denostamos en creer que es mágico.

Aquí hay barcos a la deriva, robledales y hayedos, pueblos con escasos habitantes, patrimonio arquitéctónico y sobre todo silencio,  un torbellino de silencio y niebla y lluvia que remozan las viejas fachadas para versificar la soledad de estos núcleos que nunca desaparecerán.

Esta preciosa ruta que discurre por pistas que simulan ser carreteras y por sendas que se abren a paisajes de ensueño, discurre entre Cantabria y Burgos, creo que en algunos lugares se abrazan.

Se inicia este hermoso recorrido en Quintanilla de Rucandio (Valderredible, Cantabria). Son alrededor de 8 km., unas 3 horas aproximadamente.

Veré tres pueblecitos pero también mucho bosque de arces, avellanos, hayas, robles...

Otoño de uvas maduras y una rebelión de amarillo en las ramas. 

De ciervas a lo lejos al amparo de elevados hayedos.
Al fondo el macizo del Castro, 1.193 m.

De carteles que me recuerdan que envejecemos como la madera a la intemperie.

Al fondo, Renedo de Bricia. 

Hermosos bosques de roble (Quercus Pyrenaica) y hayas. Tierras que dan buenas patatas. Cielos grises que se transforman en extensas encrucijadas.

La entrada a un pueblo silencioso. No me crucé con nadie.

"Durante la Guerra Civil, los pueblos de Bricia soportaron fuerte sitio y sus edificios se utilizaron como atrincheramientos que, en el caso de Renedo, casi suponen su desaparición física. Quizás por esta razón no se conserve un rico patrimonio aunque, como conjunto de arquitectura rural se mantenga decentemente.

En la iglesia de San Miguel, todavía se conserva un resto muy tosco de una anterior fábrica románica, en donde hoy se alberga la pila bautismal"
Se trata de la capilla lateral que hace de baptisterio.

Renedo se las idea para demostrar que las vistas que ofrece son de lo más hermosas.

Salgo de la soledad amiga entre viviendas nuevas y otras que lamentan su destino. Al fondo, el Castro.

En 1587 contaba con 11 vecinos. En 1591 aparece como Renedo de Rucandio con 13 vecinos de los cuales, 11 eran pecheros, 1 hidalgo y un clérigo.

En 2012 contaba con 10 habitantes

Para situarme geográficamente añadiré que me encuentro al borde mismo del páramo de Valdebezana que es la entidad geológica que, junto a La Lora, delimita la frontera con la provincia de Burgos.

Paso junto al cementerio.

Y admiro las composiciones arbustivas que nos obsequia la naturaleza, aquí avellano con acebo.

Paradores de Bricia, pequeño caserío.

El navío es Castro de Barrio, 1.054 m. De probable ocupación en la Edad de Hierro.

Me acerco a Barrio de Bricia. No puedo negar que desde esta distancia ya lo imagino un pueblo encantador.

Estoy en las Merindades de Burgos. Cuántas similitudes con otras entradas que haré después.

En 2015 contaba con 11 habitantes.

Es la capital del municipio Alfoz de Bricia.

Descubro enseguida el encanto de este pueblo, es todo sensaciones, un tesoro que miman sus escasos habitantes. Con uno de ellos conversaré a la salida del centro social, está muy orgulloso de su Barrio.

Un poco de historia:"...Partido judicial de Sedano, ayuntamiento titulado de Alfoz de Bricia... Y con clima sano. Tiene una iglesia parroquial dedicada a San Salvador y servida por un cura párroco, una escuela de primeras letras para niños de ambos sexos, y varias fuentes de buenas aguas para el surtido del vecindario y abrevadero del ganado.

El terreno es arcilloso y frío, con un monte al SO...En la montaña que existe a la parte del norte se ve un castro, de construcción muy antigua. Dista 2,096 pasos del pueblo, cruza la carretera que se está abriendo desde Santander a Burgos, y la correspondencia la reciben de Soncillo por medio de un peatón...Producción bastante escasa, siendo el centeno la más abundante, el ganado consiste en vacuno y lanar churro. Población 16 vecinos, 60 almas" Madoz.

De San Salvador se puede alabar su perfecta factura de sobria cantería. Lleva la torre en los pies, como función de campanario pero tambien podría haber tenido un caracter defensivo en su día. 

El porche es en realidad una nave lateral que recuerda la función de los antiguos pórticos, en este caso cerrado. De las dos capillas junto a la cabecera, una de ellas debe ser la sacristía.

Tiene  bóvedas de crucería lo que hace pensar que sea de mediados del siglo XVI.

Se eleva en una planicie sobre el pueblo, bien podría tomar el relevo de aquel castillo cercano del que no quedan restos.

Luis E. Prieto nos describe en su estupendo libro, "Caminar el sur de Cantabria", lo siguiente:"Descubrir Barrio. Este pueblo, encaramado en el Páramo, preámbulo de las variopintas Merindades Burgalesas; admite un plácido paseo... Su caserío conserva rincones, galerías, plazas y jardines, mimados por los nuevos habitantes de fin de semana, que además abren hospitalarios un estupendo bar comunitario. Un buen lugar para parar, charlar, mirar y saber"

"...En su iglesia,la sillería está mordida con saña por las balas, componiendo una sorprendente obra de cantería bélica, labrada durante la Guerra Civil..."

No solo hay macetas con flores, parra virgen con su rojo encendido...también un serbal del cazador que brilla por sí solo en este bien conservado pueblo.

Pero no todo se ve. A la derecha se localizaba la iglesia de la Magdalena, hoy desaparecida. Como el castillo que tuvo Barrio. 

Estos caminos que conectan los páramos con el valle de Valderredible estuvieron vigilados por la Orden de San Juan de Jerusalén.

La historia va hilvanando vastos párrafos al encuentro de la inquietud del que quiere saber.

Conforme me voy alejando de Barrio de Bricia acontece que una niebla va apagando mi camino.

Creo que quiere intimidarme y hacerme regresar al pueblo. Cuántas veces me habré preguntado qué pasaría si hubiese cambiado el rumbo. El destino no siempre se nos revela.

Entre brezos y robles, la piedra eterna muestra sus esquivas oquedades.

La niebla espesa me impide ver los pueblos de Rucandio, Soto Rucandio y Quintanilla de Rucandio.
A la derecha, el Castro.

Quintanilla de Rucandio, sin duda.

Entre bellísimos bosques en los que el rey es el roble, la iglesia de Santa María parece caligrafía de Dios.

Admito que me equivoqué de camino, es lo que tiene la niebla, es lo que tienen los árboles...

Mientras la niebla se disipa, al fin encuentro mi senda. 

"Aequam memento rebus in arduis servare mentem" Horacio.

Retorno a Madoz que nos dice de Quintanilla de Rucandio:"...El terreno es de tercera calidad y de secano, por él corren las aguas del río titulado Hozas. Hay un monte propio cubierto de roble y hayas...Los caminos dirigen a los pueblos limítrofes. Recibe la correspondencia de Reinosa. Producción: grano, patatas y pastos. Cría toda clase de ganados y caza de varios animales. Cuatro molinos harineros. población 30 vecinos, 440 almas..."

Y la lluvia despierta mientras tanto impresiones, nos limpia de confusiones, nos libera de apócrifos juicios...

 "En la provincia de Santander, partido judicial de Reinosa...Situación en una llanura dominada por dos escarpadas rocas; su clima es templado; sus enfermedades más comunes fiebres catarrales. Tiene 32 casas entre ellas la de los Tagles con su torre y un letrero que dice: "Soy de los Tagles y Tatayos, que a la sierpe mató y con la infanta casó"  Iglesia parroquial Santa María...una ermita a la salida del pueblo dedicada a San Antonio y buenas aguas potables..." Madoz.

En 2012 contaba con 8 habitantes.
Me cruzaré con dos.

La lluvia que va arreciando tiene esa condición de revertir la acritud en serenidad. Nuestros argumentos no tienen porqué ser certeros, nos equivocamos a igual manera que cuando se cierra por última vez la puerta de tu casa. Quizás regreses pensarás, aunque lo más seguro es que jamás vuelvas.

Pero la escena, mágica y desvinculadora escena, está muy cerca.

Sobre una loma, en un enclave privilegiado, se encuentra Santa María. De buena sillería, es un templo románico (XII-XIII), de una sola nave y ábside semicircular.

En épocas posteriores se añadió el pórtico, la espadaña, la sacristía y una torre cilíndrica.

La situación meridional de la espadaña no sigue la norma de este tipo de templos, que es la de la orientación occidental, quizá por la falta de terreno en el lado oeste.

Me quedo contemplándola bajo la lluvia. Recorro toda su planta, me asomo a la escalera, pero al final...

...me decido a guarecerme en el pórtico. Un arce esparce crujientes hojas. La tarde, desdeñosa, intenta abrirse paso sin atisbos de impaciencia.

Una nota en el pórtico nos recuerda, que en épocas pasadas, existió el "arca de la misericordia", un cofre donde se dejaba trigo para las personas más necesitadas con la condición que lo devolvieran cuando las cosechas fueran mejores.

Y mientras, a ras del suelo, ¿quién sabe leer las piedras?

Este tímpano gótico incrustado en un paramento del pórtico es la joya del templo, es parte de una portada desparecida.

Representa la Epifanía: Los Reyes Magos adorando a la Virgen con el Niño y San José. Sobre ellos, la estrella de Belén.  Se cree que está vinculado al taller de los maestros de Gredilla y Moradillo de Sedano.

Aquí no hay puertas que flanquear, pero si crees que vives en un sueño, no permitas que te abran los ojos.

Sobre los tejados se alza la niebla, sigue lloviendo, dejo que la tierra mojada me cerque.

La escritura de Dios lleva la firma de un cantero, la elegancia de un capitel, el atardecer bajo un porche contemplando como el mundo aun no muere.

        Octubre 2016.

  Para bien documentarse:

-aldeaglobal.net: "Iglesia de Santa María de Quintanilla de Rucandio"

-Ayuntamiento de Valderredible, página web.

-Sur de Cantabria.

-Luis E. Prieto: "Caminar el sur de Cantabria"

Tierras de Burgos: "Los pueblos de Bricia"

A mi hermano, por su inestimable ayuda.