He rebuscado en los anales de mis "memorias" y he encontrado una ruta que, atención, no solo la hice completa si no que además le añadí más kilómetros pues el punto de partida lo tomé en Ferreirela de Arriba, lugar donde siempre me hospedo cuando arribo a Los Oscos. Es el contrapunto a la anterior, la del Silencio.
Permitirme un consejo, alguna vez en la vida, visitar esta comarca que se encuentra vertebrada por maravillosas rutas, os enamorará, os lo aseguro.
Permitirme un consejo, alguna vez en la vida, visitar esta comarca que se encuentra vertebrada por maravillosas rutas, os enamorará, os lo aseguro.
Solo tengo que descender por mi "camino" entre avellanos y moras, y llegar hasta As Barreiras.
Era un 13 de septiembre del 2014 y me acompañaba mi maltratada cámara, las mismas caídas, los mismos tropiezos.
Eran las 10.40 cuando pasé por ti.
Las casas, el tejo, el río...
La verja de la ermita abierta como despidiéndome, buen viaje.
Eran las 10,50 h. cuando me internaba en un tunel vegetal, hoy llegaría muy lejos.
Ya arriba, el camino que lleva al pequeño caserío de Parada, no hay que pasar por él.
Tomo prestada esta fotografía de otro día, porque en realidad al pasar por Ferreira no hice ninguna, quizás me detuve a hablar con alguien, aquí siempre he visto personas que tomaban el sol, a diferencia de As Barreiras que en invierno apenas lo ven.
Además es aquí donde está el panel de inicio de la Ruta A Coba, PR-AS 153. Es circular, de unos 13 km. de longitud, dificultad media, y unas 5 horas el recorrido. Yo haré unas 8, al final, con todos los contratiempos pero feliz por conseguirlo.
Una hora más tarde, desde los cielos veo Ferreira, ya he pasado por ella, la he fotografiado tantas veces.
De fuentes he escrito mucho en cada camino hecho.
Era un 13 de septiembre del 2014 y me acompañaba mi maltratada cámara, las mismas caídas, los mismos tropiezos.
Eran las 10.40 cuando pasé por ti.
Las casas, el tejo, el río...
La verja de la ermita abierta como despidiéndome, buen viaje.
Eran las 10,50 h. cuando me internaba en un tunel vegetal, hoy llegaría muy lejos.
Ya arriba, el camino que lleva al pequeño caserío de Parada, no hay que pasar por él.
Tomo prestada esta fotografía de otro día, porque en realidad al pasar por Ferreira no hice ninguna, quizás me detuve a hablar con alguien, aquí siempre he visto personas que tomaban el sol, a diferencia de As Barreiras que en invierno apenas lo ven.
Además es aquí donde está el panel de inicio de la Ruta A Coba, PR-AS 153. Es circular, de unos 13 km. de longitud, dificultad media, y unas 5 horas el recorrido. Yo haré unas 8, al final, con todos los contratiempos pero feliz por conseguirlo.
Una hora más tarde, desde los cielos veo Ferreira, ya he pasado por ella, la he fotografiado tantas veces.
De fuentes he escrito mucho en cada camino hecho.
A las 12,22 h. habré llegado a Nonide, ahora leo que es el punto más elevado del recorrido.
Esto sí que es un cartel.
Aunque voy sola siempre me salen "amigos" en los caminos, en las aldeas.
Para encontrar Nonide, el diccionario de Miñano me remite a Santa Eulalia:
"Concejo Redondo de España, provincia de Asturias; 188 vecinos, 946 habitantes, 24 capillas ó ermitas...Los habitantes se hallan distribuidos en la villa de Santalla ó Santa Eulalia, cabeza del concejo y varias aldeas, a saber: Santalla ó Santa Eulalia, Ferreyra, Nomide, Branavella, Villamartin, Mazonovo, Feigeira, Busqueimado, Pousadoiro, Lineras, Sarceda, Barcia, Ferrurela, Biduedo, Pumares, Perulleira, Vega del Carro, Balina, Ventoso, Quintaela, Trapa, Murias, Souto, Caraduje, Barreiras, Castro y Quintana..."
De todas formas siempre acabo recopilando algún dato, por pequeño que sea el lugar, del Catastro de Ensenada (1752) encuentro, veamos, lo siguiente, 27 molinos funcionaban, de una sola piedra.
"Otro en el arroyo de Vila del lugar de Nonide muele sólo de mal tiempo, que se considera en tres meses; perteneze a Manuel Castrillón y otros vecinos de Nonide y Quintela, a quienes dejará de utilidad una hanega de pan de centeno cada año"
"...la de los Remedios, en el lugar de Nonide...Las de Ferreira y Nonide se presume fueron iglesias por descubrirse a la inmediación de ellas varios sepulcros, y cavando salen huesos humanos..."
"El tiempo detenido en Santalla de Oscos"
José A. Álvarez Castrillón.
Ventanas vacías que no dan la réplica al caminante.
Me alegra saber que el año pasado contabas con 21 habitantes.
Y vallas enlazadas sin renunciar a su oficio.
Una cantina, no estaba en la relación de Ensenada, demasiado antiguo. Sí que aparecen las de Santalla, Ferreira y La Trapa.
A las 12,50 h. me detenía junto a un roble, estoy segura.
Abajo, el impresionante cañón del río Agüeira.
Ideal sería que supiese reconocer las aldeas, los montes, los ríos...
Los cortines.
Por dónde discurren los caminos.
Qué delicia de senda, cómo perfila los montes.
Fijáos por dónde trascurre mi ruta.
A las 13,30 h. llego hasta aquí, como tantas otras veces, no sé qué lugar es. No hay nombres para todo, quizás se me pasó verlo o quizás no estaba escrito.
Porque es obvio que un lugar sí que es.
Un cortín siempre es impresionante, pero verlo desde la distancia, contemplarlo en toda su extensión, es maravilloso.
Una fuente que ya no mana es la primera que nos habla de un lugar deshabitado, no hay nadie que pueda preocuparse de limpiarla.
Y me marcho sin saber tu nombre.
Otro cortín.
A las 14 h. llegaré al primer puente de madera.
La parte más bella del recorrido, lástima que las fotografías no puedan trasmitir tal como es todo, el colorido es la esencia del paisaje.
Bajo el puente veo el molín de Coba.
Donde confluyen el Agüeira asturiano y el Allonca gallego.
Un segundo puente, qué rincones tan hermosos.
La pizarra es la estructura del molino.
Aunque parezca complicado, un acercamiento es necesario, no puedo marcharme sin verte.
Sigo por estos caminos del hombre de antes, cuando la "xestaferia" alargaba la vida a las sendas permitiendo que nunca desaparecieran. El arreglo era para y por la comunidad, la solidaridad era el motor del mundo.
Son las 14,20 h. y debo haber llegado a una aldea llamada A Coba.
Leo que en La Coba Alta no dejemos de admirar los emparrados.
Entiendo, pues, que este pueblo se divide en dos barrios, el otro debe ser el siguiente que visite, donde se halla la pequeña ermita de Santa Marina.
Aquí no solo me fijé en la decoración tan bella de esta vivienda, también en que por aquí también trascurre un GR.
Se trata del GR-109. Camino Natural de la Cordillera Cantábrica.
Estoy en la etapa 27 que va de Castro (Grandas de Salime) hasta Santa Eulalia.
A las 15,09 h. estoy en La Coba Baja, imagino, pues aquí sí que se encuentra la capilla.
Santa Marina, a la derecha. Sin embargo no me pareció que este lugar estuviese deshabitado, oía a alguien trabajar.
Lo cierto es que no sé si fue a partir de aquí cuando comenzó a tronar.
Y toda esta senda por delante.
Aquí hubo un incendio en 2002, una pérdida irreparable.
A las 16,25 h. nada de lo que se ponía por delante resultaba fácil.
Quizás pensé en guarecerme.
No entiendes que una ruta sea de dificultad media-alta, en algún sitio lo leo, hasta que la haces.
Se agradece que la señalización sea perfecta, se agradece.
Ferreira, a la vista, ¿llegaré?
A las 16,54 llego al área recreativa, ya queda menos.
A las 17,45 llego arriba, por fin puedo quedarme a resguardo y sentarme y descansar, en la ermita. Largo recorrido a mis espaldas, y aún me quedan bastantes más pasos.
A las 18 h. abandono Ferreira, aún me queda un buen trecho hasta llegar a Ferreirela de Arriba, será ya noche y habrá merecido la pena, el paso por tantas aldeas, las paradas, los bosques, las sendas que penetran en la montaña, la lluvia, poderosa lluvia...
Septiembre 2014.
Como siempre que hago una ruta por Santalla, se la dedico a mis amigos Fina y Luis, de Casa Talán, los mejores anfitriones.
Imprescindibles:
-El magnífico libro de José A. Álvarez Castrillón: "El tiempo detenido de Santalla de Oscos"
-Una visita a la oficina de turismo de Santalla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario